Cuando otro año
más esta a punto de terminar, la mayoría de las personas empiezan a pensar en
cuales serán sus propósitos de año nuevo, algunos se proponen ser mejores en la
escuela, bajar de peso, ser mas ordenados, dejar de fumar o de beber alcohol
entre muchos otros. Y efectivamente comienzan el año con todas las ganas de ser
“mejores personas.”
Yo soy uno
de ellos , que año tras año quiere un
cambio en su vida y es por eso que me gustaría compartir unas cuantas de mis
experiencias acerca de cómo la mayoría de las veces he fallado y no he podido cumplir mis
propósitos.
Para
empezar siempre me propongo las mismas cosas, bajar de peso, hacer ejercicio,
comer mas sano en fin cuidar mas de mi salud. Y así comienzo el año con todas
las ganas del mundo, me pongo a hacer ejercicio, dejo de consumir comida
chatarra y trato de ser mas ordenada con mis cosas. Al pasar los primeros meses
todo va muy bien y a mitad de año quiero darme por vencida y con miles de
pretextos empiezo a dejar lo que comencé y así al terminar el año, vuelvo a
estar como al principio y no logró nada y espero con ansias un nuevo año para
tratar de lograrlo y me digo a mi misma esta vez si podrás.
Sinceramente
estoy muy cansada de no lograr lo que me propongo y es por esa razón que ya no
quiero volver a prometerme nada de ese tipo de cambios al empezar el año, sino
que voy a hacerlo sin importar la época del año que sea y no hacerlo al extremo
dejando de comer de golpe y haciendo horas de ejercicio mas bien empezar poco a
poco hasta que se vuelva un habito y no dejarlo nunca.
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